Después de que la
caravana de los cautivos de Karbalá fue llevada a Siria, la honorable señora
Zaynab (P) dio un valiente discurso en la reunión de Yazid. Ella alabó a Dios y
envió saludos a Su Profeta (PBD) y luego recitó algunas aleyas coránicas acerca
del destino de los opresores. Criticando a Yazid por sus crímenes, ella le dijo
que su Califato y poder no eran una virtud ni una gracia divina; sino una
desgracia por la que cometería más pecados y recibiría más castigos.
El Imam Sayyad (P) fue conocido entre los
musulmanes como un hombre justo y virtuoso. Las grandes personalidades
islámicas, incluyendo los compañeros del Profeta (PBD) y los líderes de las
Escuelas Sunitas han elogiado al Imam (P) con diferentes palabras. Él fue
conocido entre ellos como el hombre más sabio en la Jurisprudencia del Islam.
El Imam Sadiq (P) refuta categóricamente la
idea de la posibilidad de ver a Dios refiriéndose a una narración profética y a
dos aleyas del Sagrado Corán. Según el Imam Sadiq (P), no es posible ver a Dios
con los ojos, y si alguien lo considera posible ha cometido una blasfemia. Este
hecho está confirmado en las aleyas coránicas que mencionó el Imam (P).
Los Teólogos Shiítas creen que Dios no es
visible con nuestros propios ojos; ni en este mundo ni el día de la Resurrección,
pero puede ser percibido con el corazón. Al contrario, los Wahabís y algunos de
los sunitas creen que Dios será visto en el más allá.
La aleya al-Ikmal
es el tercer versículo de la Sura al-Ma'ida, que fue revelado al Profeta (PBD)
durante el evento de Gadir, después de que el Profeta declarara públicamente el
Imamato del Imam Alí (P).
El Imam Baqir (P) fue el quinto Imam infalible
cuyo período de Imamato duró diecinueve años. En este período, el Imam Baqir
(P) emprendió un gran movimiento científico que alcanzó su punto máximo en la
época de su hijo el Imam Sadiq (P). Él alcanzó el martirio en el año 114 de la
hégira, en la ciudad de Medina.
Según las narraciones trasmitidas por
Ahlul-Bait (P) es imposible ver a Dios con la vista humana. Sin embargo, podemos
ver a Dios con el corazón. En otras palabras, el creyente puede alcanzar un
nivel elevado de fe; hasta tal punto que siente a Dios en su corazón como si Lo
estuviese viendo. Al respecto, hay un hadiz donde el Imam Sadiq (P) le dijo a
una persona que le había preguntado acerca de la posibilidad de ver a Dios: “El
hecho de ver a Dios con el corazón es diferente que verlo con los ojos. ¡Glorificado
y Exaltado sea! Dios está por encima de ser como Lo describen."
La honorable señora Fátima (P) ayudaba a su
padre desde los primeros años después de la aparición del Islam y estuvo con a
él en todos los acontecimientos importantes tales como: la batalla de Uhud, la
conquista de la Meca, la Emigración a Medina y la batalla de Ahzab.